Esto es el resultado de pasearte un viernes al uso por Murcia (o insértese en vez de Murcia cualquier otra ciudad de su elección) de camino a un concierto. De repente, sientes que te has colado en un remake moderno y "hipster" de "La Invasión De Los Ladrones De Cuerpos", donde un Donald Sutherland, con gafotas y bigotete a lo Terry Richardson va a delatarte ante "chopicientas" adolescentes, todas con el mismo uniforme: tejanos cortos, medias, rotas o no, esto se deja a elección de la colega que las lleve, botas (no importa que vivan un infierno en sus pies) y camiseta de tirantes, color a su elección, aunque la blanca suele ser la más aceptada.
En fin, yo al principio le pillaba la gracia. "Qué grunge", me decía. Pero cuando ves a mil chicas vestidas igual, siendo incapaz de distinguir entre ellas, como si de copias y copias del Agente Smith de Matrix se tratara, empiezas a agobiarte con el "look" este de las narices.
Deby La Ornitorrinco
